Estudio comparativo de la presencia de metales pesados utilizando líquenes epífitos corticícolas en la ciudad de Talca, Región del Maule, Chile

Resumen

Se determinó las concentraciones de Cu, Cr, Fe, Pb y Zn en talos de tres especies de líquenes epífitos: Flavopunctelia flaventior, Phaeophyscia orbicularis y Ramalina ecklonii, colectados en tres sectores de la ciudad de Talca (Región del Maule, Chile), expuestos a diferentes actividades humanas. La primera recoleccón de muestras fue realizada por Pereira & Tapia en 1999 y sus resultados se compararon con muestras colectadas el año 2016. Las determinaciones de metales se realizaron por espectroscopia de absorción atómica con llama, considerando para su análisis el talo de cada liquen como muestra representativa. La validación metodológica se realizó utilizando material de referencia certificado (SRM-1570). Los mayores niveles de concentración en los tres sectores y en los dos períodos de muestreo fueron para Fe > Zn > Pb > Cu > Cr > Cd. En 1999, el rango de concentraciones de los metales pesados en peso seco varió: 335,5-1724 μg/g para fierro (Fe); 40,7-209,5 μg/g para zinc (Zn); 10,4-64,2 μg/g para plomo (Pb); 10-28,7 μg/g para cobre (Cu); 0,6-4,8 μg/g para cromo (Cr); 0,1-0,4 μg/g para cadmio (Cd), mientras que en el 2016 los rangos fueron: 1356,6-14280,4 μg/g para fierro (Fe); 26,8-179,5 μg/g para zinc (Zn); 13,5-102,5 μg/g para plomo (Pb); 7,9-36,2 μg/g para cobre (Cu); 3,6-24,6 μg/g para cromo (Cr) y no detectado para cadmio (Cd). Las muestras colectadas el año 2016 presentaron en general mayores niveles de concentración de Fe, Cu, Pb y Cr que las colectadas el año 1999, especialmente las correspondientes a la zona central de la ciudad de Talca. De acuerdo a los resultados, las especies que más metales pesados acumularon fueron P. orbicularis seguidas por F. flaventior y R. ecklonii. Se puede concluir que las especies foliosas son potencialmente las mejores candidatas para ser usadas como bioindicadores de largo plazo que la especie fruticosa. El sector céntrico de la ciudad es el más contaminado debido a la presencia de industrias de curtiduría y al aumento de tráfico vehicular que ha tenido la ciudad en las últimas dos décadas producto del desarrollo agrícola y el crecimiento de la población.